6.6 millones de niños murieron de hambre en el mundo cifra menor que en 1990 que fue de 12.
Además
de una alimentación deficiente, neumonía (17%), nacimiento prematuro (15%),
complicaciones durante el parto (10%), diarrea (9%) y malaria (7%), fueron las
principales causas de mortalidad infantil.
Son el
Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización Mundial de
la Salud (OMS), el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU y el
Banco Mundial que han ofrecido estos detalles.
El dato
implica un descenso del 47% respecto a 1990, cuando se registraron 12 millones
de muertes de menores de 5 años; un “avance significativo” hacía el cuarto
Objetivo del Milenio, que busca reducir la mortalidad infantil en dos tercios
entre 1990 y 2015.
“Hemos
salvado millones de vidas, pero podemos hacerlo aún mejor porque la mayoría de
las muertes de niños se pueden prevenir. Lo que precisamos es un mayor sentido
de la urgencia”, afirma el director ejecutivo de UNICEF, Anthony Lake, en el
informe.
La
reducción de la mortalidad infantil se ha acelerado en los últimos años, ya
que, tras descender a un ritmo anual del 1,2% entre 1990 y 1995, en el periodo
2005-2012, se logró una disminución media por año del 3,9%.
La
proporción de muertes infantiles en el primer mes -periodo neonatal- de vida ha
crecido en un 19% desde 1990, al pasar de representar el 37% en esa fecha, al
44% de 2012, debido a que la disminución de la mortalidad entre neonatos es más
lenta que entre niños mayores.
Señala
que las tasas altas de mortalidad infantil están todavía muy localizadas, ya
que cerca de la mitad de estas muertes se producen sólo en cinco países: China,
República Democrática del Congo, India, Nigeria y Pakistán.
La
India tiene el (22%) y Nigeria (13%) acaparan más de la tercera parte de las
muertes de menores de cinco años.
Todas
las regiones del mundo, excepto el África subsahariana y Oceanía, han recortado
su índice de mortalidad infantil en más de la mitad respecto a 1990.
Ésta es
la región del mundo con la tasa más elevada -98 muertes por cada 1.000
nacimientos-, quince veces superior a la media de los países desarrollados;
aunque avanza por el buen camino, con una reducción media anual de 4,1% entre
2005 y 2012, frente a 0,8% registrado en el periodo 1990-1995.
La Directora
General de la OMS, Margaret Chan, más de la mitad de muertes entre recién
nacidos se producen en el primer día de vida, por lo que considera “crucial”
poner especial atención en los cuidados para la madre y el bebé en las primeras
24 horas tras el parto.
Las
vidas de la mayoría de estos bebes se salvarían si tuvieran acceso a unos
cuidados mínimos de salud, como atención médica durante el parto o
antibióticos, además de prácticas sencillas como el contacto con la madre y alimentación
a base de leche materna durante los seis primeros meses de vida, aconsejan
desde la OMS.
Comentarios
Publicar un comentario
Saludos.
Mi blogs tiene problemas e ignoro las razones